Escena octava& 160;38Pág. 38 de 50Don Álvaro o La fuerza del sino - Cuarta jornadanoneD. ÁLVARODenme una espada, volaré a la muerte:y si es vivir mi suerte,y no la logro en tanto desconcierto,yo os ...
El ingenioso caballero Don Quijote de la Mancha: Que trata de muchas y grandes cosasde Miguel de Cervantes Saavedra SUMA era la alegría que llevaba consigo Sancho, viéndose, a su parecer, en privanza ...
Don Segundo Sombra: XIde Ricardo Güiraldes En el camino de luz proyectado por la puerta hacia la noche, los hombres se apiñaban como querezas en un tajo. Pedro me echaba por delante y entramos, pero ...
- IX -El hombre propone...A pesar de las esperanzas de mi amigo Zarco, Gabriela Zahara no pareció.Exhortos, requisitorias: todo fue inútil.Pasaron tres meses.La causa se sentenció en rebeldía.Yo ...
El sabor de la tierruca-XXIII: Griegos y troyanosde José María de Pereda Continuaban la calma sofocante y el cielo cargado de nubes como peñascos, con unas intermitencias de sol que levantaba ampollas ...
El tulipán negroCapítulo XXXI: Haarlemde Alejandro Dumas Haarlem, donde entramos hace tres días con Rosa y donde acabamos de entrar siguiendo al prisionero, es una hermosa ciudad que se enorgullece ...
España trágica& 160;: 19de Benito Pérez Galdós En el curso de Agosto vio Halconero el vertiginoso giro del desastre; vio la incapacidad militar de Napole& 243;n; el enga& 241;o de Francia, conducida ...
Gerona& 160;: 13de Benito Pérez Galdós A mi paso encontraba las familias desvalidas, formando horrorosos grupos de desolaci& 243;n en medio de la v& 237;a p& 250;blica, con los pies en el lodo y ...
IntroducciónLorca con Juan Ramón Jimnez y Cenobia Camprubí en el Generalife.«TODA mi infancia es pueblo. Pastores, campos, cielo, soledad. Sencillez, en suma». Así vio García Lorca su infancia. Se pue ...
Ismael& 160;: 24de Eduardo Acevedo Díaz Entre hombres de esta entra& 241;a, buscaron refugi& 243; Aldama e Ismael. La selva era una patria libre.Cuando al trote de sus caballos se aproximaban al monte ...
La estafeta romántica& 160;: 1de Benito Pérez Galdós De Do& 241;a Mar& 237;a Tirgo a Do& 241;a Juana Teresa En La Guardia, a 20 de febrero de 1837.Amiga y se& 241;ora: Por la tuya del 7, que me ...
Capítulo XXVI& 160;28Pág. 28 de 33La gaviota (Caballero)Fernán CaballeroEl mundo es un compuesto de contrastes. No es muy nueva ni muy original esta observación; pero cada día se nos presentan a la ...
La Primera República Capítulo XXIX de Benito Pérez Galdós Al retirarme, vi en mi mente con absoluta claridad que mi papel en el mundo no era determinar los acontecimientos, sino observarlos y con ...
Mendizábal& 160;: 19de Benito Pérez Galdós En el mismo instante vio D. Fernando, en el hueco de la puerta, una mujer, una joven, que m& 225;s que persona humana le pareci& 243; divinidad bajada del ...
Narváez Capítulo XXXde Benito Pérez Galdós Página histórica me pareció el verídico cuento traído por Rafaela, y pensando en él y en la profunda lección que entraña, me fui a correr por Madrid en ...
Prim Capítulo VIII de Benito Pérez Galdós Pasaron días, y el buen Ibero, ocioso en Madrid y atribulado por la inutilidad de sus pesquisas, se volvió a Samaniego, a donde le llamaban el cuidado de su ...
Prim Capítulo XXXI de Benito Pérez Galdós En mala ocasión iba Manolita con estas andróminas al amigo Chaves, que entonces se hallaba en el paroxismo de su actividad demoledora. Los trabajos no ...
Capítulo VII& 160;07Pág. 07 de 29TristanaBenito Pérez GaldósAlgo se asustaba Tristana, sin llegar a sentir terror ni a creer al pie de la letra en las fieras amenazas de su dueño, cuyos alardes de ...
IntroducciónEl naturalista gaditano Padre Jos Celestino Mutis, en cuya casa de Bogot se alojaron Humboldt y Bonpland.A pesar de sus éxitos, Humboldt echaba de menos el contacto con el progreso y c ...
IntroducciónUna de tantas caracterizaciones del personaje Chaplin-Charlot.IGUAL que existe una calma poco antes de que descargue la tormenta, en la tumultuosa infancia de Chaplin se produce al fin un ...
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