Montes de Oca : 15

04/08/2010 3.302 Palabras

Montes de Oca Capítulo XV de Benito Pérez Galdós Ven a mis manos, ven, arpa sonora. Baja a mi mente, inspiración cristiana, y enciende en mí la llama creadora que del aliento del querube emana. Esto recitaba María Luisa una tarde, atizando el fogón para poner a calentar unas planchas, cuando sintió entrar a Ibero en el comedor, donde estaba Cavallieri copiando música. Presurosa salió a recibir al Coronel, que en aquella casa merecía de continuo extremadas consideraciones, y con oficiosa y dulce voz, antes que la del bajo acabase de saludar al visitante, le dijo: «Santiago, por Dios, aguárdela usted, que no puede tardar: ha salido con Doña Leandra a comprar loza». Con pretexto de trasladar a sitio más decoroso la visita, fuese con Ibero a la sala, donde acabó los conceptos que expresar no quería delante de Cavallieri. «No pase lo de ayer y anteayer, ¡por Dios!... Usted no tuvo paciencia para esperarla, y así se nos va el tiempo, y se escapan los días...

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info