Las inquietudes de Shanti Andía: 114

23/10/2009 1.063 Palabras

none Pág. 114 de 156 Las inquietudes de Shanti Andía - Libro quinto Pío Baroja -Nada; ha preguntado por usted, ha dejado el paquete y se ha ido. -¿Le has visto luego en la carretera? -No. -¿Ha pasado la diligencia en seguida? -Sí; no ha tardado mucho. -¿De manera que se ha podido marchar en el coche? -Sí, muy bien puede ser. A la mañana siguiente, cuando pasó Samson, el cochero, le pregunté si recordaba las señas de un hombre con una caja, que había venido en el coche el día anterior; pero no recordaba más que de un carnicero con una cesta y de una mujer con un saco. No tenía mucha confianza en Samson, porque era hombre muy marrullero, y no quise preguntarle más. Hablé del caso a Garmendia, el farmacéutico, y éste me dijo: -Lleve usted la caja a la botica, y veremos lo que tiene dentro. Por la noche la cogí y la llevé. -Indudablemente, aquí, si hay algo peligroso, debe estar en abrir la caja con la llave. Vamos a atacarla por otro lado. Garmendia...

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info